24.6.07

algo se rompió...

Algo se rompió, no sé si fue mi corazón contra el piso o mi respiración dentro del pecho. Fue un ruido sordo, seco en el teléfono, algo se rompió y la hemorragia explota aunque es interna. Explota y se desparrama entre palabras huecas que no son mías y que nunca podrán ser mías, muerte súbita, repentina, el dolor se siente como algo que se comprenderá luego. Y lloro porque no queda otra opción en el mundo, lloro porque duele tanto que quema.
Cada parte de mi cuerpo se agita, tiembla, se conmueve de dolor, se crispa de angustia, el amor duele como ninguna otra cosa en el mundo, y no es domingo. Hemos inaugurado un sábado suicida, un asqueroso y digno representante del patetismo. Cuando hay algo que no vuelve y no vuelve aunque parecía que si, cuando algo te demuestra que no existe ante tus ojos y se te desvanece entre los dedos, te deja tiritando en la más angustiosa lluvia torrencial jamás vista.
Te aplasta, te comprime, te exprime, te saca, el amor mata, como psicópata a sueldo que ha diseñado el plan perfecto para aniquilarte. Te deshace, sutil o grotescamente. el amor...

1 Comments:

Blogger Martín H dijo...

"el amor de los dedos extendidos emana"

saludos
m

12:01 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home